5to. Poema. Poemario Tiempos de Encuentros. A. Valderrama.
CHAVINILLO
Llegué, para cumplir tareas educativas,
encontré delincuentes que usan gatillos,
saqueaban, mataban a las comitivas,
eran hienas humanas, que tales pillos.
En este mal escenario, hice malabares
para no fracasar, di buena educación.
A las bestias no se doman con flores,
hay que concientizarlos con decisión.
De cara a la realidad, rogando a Dios
desde la comunidad, desde la escuela;
luché con fuerza, para hacer cambios
no me sometí al bandido, a su secuela.
Mis ideas de guerrero invicto, no cedió
mi sangre roja, caliente, de buena marca
contra los chantajes, amenazas, los odios
construimos la Autodefensa de Masas.
Me duele el corazón, vivo junto a la muerte,
hay paz en las colinas, hay paz en el infinito
pero en este pueblo, no hay paz para la gente
los bandidos, los papas, propician laberinto.
Hay paz en los ríos que recorren eternamente,
la alegría de las muchachas, ausente siempre
los niños, la juventud buscando al ausente,
el candor de los años mozos no está presente.
Trabajé sin temor a la muerte, oh Chavinillo
ramilletes de luceros brotan de tus montañas,
se elevan constantemente, hacia el cielo bello
enseñé a los hijos de tus forajidos con mañas.
Fortaleza, contigo viajo siempre, dame la mano
dale a mi corazón, a mi vida, alguna esperanza
forjemos una nueva sociedad en este territorio
afirmemos la Autodefensa, ¡Démosle fuerza!
Septiembre de 1984